A continuación observemos el siguiente video
Ni el demonio, ni los hombres pecadores están en condiciones de recibir a Jesús como Mesías. De ahí surge que intenten desviarlo de su misión.
Tentación significa prueba y, también, seducción. Puede tentar Dios, en el sentido de que prueba al hombre como hizo con Abrahán (cfr. Gn. 22, l) También puede tentar el diablo u otros hombres. Cuando es el diablo el que tienta, intenta seducir, engañar, hacer pecar al hombre y perderlo.
Todos los personajes clave de la historia sagrada son tentados: Adán y Eva, Abrahán, Moisés... el pueblo de Israel en su conjunto durante la peregrinación por el desierto. Las caídas del pueblo de Israel van a ser rectificadas por la fidelidad de Jesús. También la Iglesia será tentada y cada uno de los fieles.
Tentaciones del diablo en el desierto
Constituyen el primer intento diabólico de reducir la misión divina de Jesús a un plano humano.
Las tentaciones fueron tres. El denominador común de las tres es que Satanás intenta rebajar la misión de Jesús pretendiendo que actúe en beneficio propio. En concreto:
a) Quiere que ejerza sus poderes para remediar sus propios problemas, como tener hambre después de ayunar cuarenta días, convirtiendo las piedras en panes.
b) Induce a Jesús a la vanidad y la soberbia, moviéndole a que pida a Dios un milagro innecesario: que se lance desde el pináculo del Templo para que la espectacular intervención divina le dé un inmenso prestigio. Es una clara tentación contra la humildad propia del Mesías.
c) Le ofrece el dominio sobre todos los reinos del mundo para que se convierta así en un rey mesiánico terreno, como el que esperaban la mayoría de los judíos de aquel tiempo. Jesús contesta: «¡Márchate, Satanás! »
Estas tentaciones se repetirán durante la vida de Jesús. También se repetirán en la vida de la Iglesia y en la de cada cristiano. Jesús muestra el camino: fidelidad a la misión divina de salvación y no dejar que esta misión se reduzca a una tarea terrena. Ser creyente, ser cristiano, nunca será un modo de conseguir ventajas humanas. Más bien significará sacrificio para cumplir los planes de Dios.
Tentación significa prueba y, también, seducción. Puede tentar Dios, en el sentido de que prueba al hombre como hizo con Abrahán (cfr. Gn. 22, l) También puede tentar el diablo u otros hombres. Cuando es el diablo el que tienta, intenta seducir, engañar, hacer pecar al hombre y perderlo.
Todos los personajes clave de la historia sagrada son tentados: Adán y Eva, Abrahán, Moisés... el pueblo de Israel en su conjunto durante la peregrinación por el desierto. Las caídas del pueblo de Israel van a ser rectificadas por la fidelidad de Jesús. También la Iglesia será tentada y cada uno de los fieles.
Tentaciones del diablo en el desierto
Constituyen el primer intento diabólico de reducir la misión divina de Jesús a un plano humano.
Las tentaciones fueron tres. El denominador común de las tres es que Satanás intenta rebajar la misión de Jesús pretendiendo que actúe en beneficio propio. En concreto:
a) Quiere que ejerza sus poderes para remediar sus propios problemas, como tener hambre después de ayunar cuarenta días, convirtiendo las piedras en panes.
b) Induce a Jesús a la vanidad y la soberbia, moviéndole a que pida a Dios un milagro innecesario: que se lance desde el pináculo del Templo para que la espectacular intervención divina le dé un inmenso prestigio. Es una clara tentación contra la humildad propia del Mesías.
c) Le ofrece el dominio sobre todos los reinos del mundo para que se convierta así en un rey mesiánico terreno, como el que esperaban la mayoría de los judíos de aquel tiempo. Jesús contesta: «¡Márchate, Satanás! »
Estas tentaciones se repetirán durante la vida de Jesús. También se repetirán en la vida de la Iglesia y en la de cada cristiano. Jesús muestra el camino: fidelidad a la misión divina de salvación y no dejar que esta misión se reduzca a una tarea terrena. Ser creyente, ser cristiano, nunca será un modo de conseguir ventajas humanas. Más bien significará sacrificio para cumplir los planes de Dios.
Fuente: http://es.catholic.net